Siguiendo con estas lecciones de escalada "sufridas" en carne propia vamos a la segunda parte de las mismas.
Lo siguiente que he aprendido es que: ESCALAR REQUIERE TENER FE.
Me explico:
Durante los ejercicios de escalada ponemos habitualmente nuestras vidas en manos del material que usamos, tales como arnés, cuerdas, cintas, etc. Contando que a una altura de 30 metros podemos estar colgando de una línea de vida realizada en cualquier taller de Taiwán debemos tener fe en que el tipo que la terminó y la revisó ese día no viniera mosqueado con la parienta, que el material fuera conservado en buen estado y muchos etc más.
Tambíén nos vamos anclando en vías previamente equipadas, hay que tener fe en el material con el que se ha equipado y en la profesionalidad de los equipadores.
Escalamos con un compañero, debemos confiar que está atento mientras escalas y no en el mensaje que le va a mandar a la piva para ver si le perdona por no haberle dicho que venía escalar.
En fin, hay muchísimas variables ajenas a tu habilidad como escalador que pueden hacer que tengas algún problemilla jaja. Yo tengo fe.
Resumiendo:
1) Escalar duele.
2) Para escalar bien hay que tener fe.
#Habrámás
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